jueves

Capítulos 4 al 6



Capítulo 4

LAS ILUSIONES DEL EGO

Introducción
1   El resultado de una dedicación genuina es la inspiración, palabra que si se entiende correctamente, es lo opuesto a la fatiga… Mas estar inspirado es estar en el espíritu.  Ser egocéntrico es estar des-animado, más estar centrado en Sí Mismo, en el buen sentido de la expresión, es estar inspirado o en el espíritu.
3   El viaje a la cruz debería ser el último “viaje inútil”… El único mensaje de la crucifixión es que puedes superar la cruz.  Hasta que no la superes eres libre de seguir crucificándote tan a menudo como quieras.

I.  La enseñanza y el aprendizaje correctos
2   Tu falso ser y el Ser de Dios están en oposición…       Son fundamentalmente irreconciliables porque el espíritu no puede percibir y el ego no pude gozar de conocimiento.

II.  El ego y la falsa autonomía
2  Todo el mundo inventa un ego o un yo para sí mismo, el cual está sujeto a enormes variaciones debido a su inestabilidad. También inventa un ego para cada persona a la que percibe, el cual es igualmente variable.
4   La creencia de que hay otra forma de percibir es la idea más sublime de que es capaz el pensamiento del ego.  Ello se debe a que dicha idea reconoce, aunque sea mínimamente que el ego no es el Ser.
7   El ego vive literalmente de comparaciones.
8   El ego cree que tiene que valerse por sí mismo para todo, lo cual no es más que otra forma de describir como él mismo se originó.
10  El ego no puede sobrevivir sin hacer juicios.

III.  Amor sin conflicto
9   En tu propia mente, aunque negada por el ego, se encuentra la declaración que te hará libre: Dios te ha dado todo. Este simple hecho significa que el ego no existe… El Espíritu Santo sabe que lo “tienes” todo y que lo “eres” todo.  Cualquier distinción al respecto es significativa solamente cuando la idea de obtener, que implica carencia, ha sido previamente aceptada.

IV. Esto no tiene por qué ser así
2   He dicho que no puedes cambiar de mentalidad modificando tu conducta, mas he dicho también, y en muchas ocasiones, que puedes cambiar de mentalidad.
3   Cuando te sientas triste, reconoce que eso no tiene por qué ser así. Las depresiones proceden de una sensación de que careces de algo que deseas y no tienes.  Recuerda que no careces de nada, excepto si así lo decides, y decide entonces de otra manera.

V. La ilusión del ego-cuerpo
1   Todas las cosas obran conjuntamente para el bien. En esto no hay excepciones salvo a juicio del ego.  

VI. Las recompensas de Dios
8   A medida que te acercas a un hermano te acercas a Dios, y a medida que te alejas de él, la distancia entre tú y Dios aumenta.  La salvación es una empresa de colaboración… Dios acudirá a ti solo en la medida que se Lo ofrezcas a tu hermanos. Aprende primero de ellos y estarás listo para oír a Dios.    Esto se debe a que el amor solo tiene una función.


Capítulo 5

CURACION Y PLENITUD

Introducción
1   Curar es hacer feliz.
2   Para poder actuar de todo corazón tienes que ser feliz… No existe diferencia alguna entre el amor y la dicha. Por lo tanto, el único estado de plenitud posible es el de absoluta dicha.

I. La invitación al Espíritu Santo
1   Al tenerlo todo, el espíritu lo conserva dándolo, y, de ese modo, crea de la misma manera en que el Padre creó. Aunque esta manera de pensar no tiene nada que ver con la posesión de bienes materiales, aún a la mente inferior le resulta comprensible en conexión con ideas.  Si compartes una posesión física, ciertamente divides su propiedad. Más si compartes una idea, no la debilitas. Toda ella te sigue perteneciendo aunque la hayas dado completamente. Lo que es más, si aquel a quien se la has dado la acepta como suya, eso la refuerza en tu mente, y por lo tanto la expande.  Si puedes aceptar el concepto de que este mundo es un mundo de ideas, la creencia en la falsa conexión que el ego hace entre dar y perder desaparece.

III. El guía a la salvación
5   El Espíritu Santo es la respuesta de Dios al ego. Todo lo que el Espíritu Santo te recuerda está en directa oposición a las nociones del ego, pues la percepciones verdaderas y las falsas se oponen entre sí.
6   El tiempo es una creencia del ego. El único aspecto del tiempo que es eterno es el ahora.
8   Tú no puedes comprenderte a ti mismo separado de los demás.
9   Lo que percibes en otros lo refuerzas en ti.    (*)

IV. Enseñanza y curación
4   Nada puede hacerte daño, y no debes mostrarle a tu hermano nada que no sea tu plenitud. Muéstrale que él no puede hacerte daño y que no le guardas rencor, pues, de lo contrario, te estarías guardando rencor a ti mismo.  Ese es el significado de “Ofrécele también la otra mejilla”.

V. El uso que el ego hace de la culpabilidad
1   El propósito del ego es infundir miedo porque solo los que tienen miedo pueden ser egoístas.    (*)
4   Todo lo que aceptas en tu mente se vuelve real para ti. Es tu aceptación lo que le confiere realidad.
5   La mente que está libre de culpa no puede sufrir.  Al estar sana, sana a su vez al cuerpo porque ella misma ha sanado.

  
Capítulo 6

LAS LECCIONES DEL AMOR

II. La alternativa a la proyección
1   Cualquier división en la mente conlleva por fuerza el rechazo de una parte de ella misma, y eso es lo que es la creencia en la separación… Dijimos anteriormente que la separación fue y sigue siendo un acto de disociación, y que una vez que tiene lugar, la proyección se convierte en su defensa principal, o, en otras palabras, el mecanismo que la mantiene vigente.
2   Repudias lo que proyectas, por lo tanto, no crees que forma parte de ti. Te excluyes a ti mismo al juzgar que eres diferente de aquel sobre el que proyectas. Puesto que también has juzgado contra lo que proyectas, continúas atacándolo porque continuas manteniéndolo separado de ti. Al hacer eso de manera inconsciente, tratas de mantener fuera de tu conciencia el hecho de que te has atacado a ti mimo.
3   La proyección y el ataque están inevitablemente relacionados, ya que la proyección es siempre un medio para justificar el ataque.
4   El Espíritu Santo extiende, y el ego proyecta.

III. La renuncia al ataque
3   La seguridad no es otra cosa que la completa renuncia al ataque. Ninguna transigencia al respecto es posible.

IV. La única respuesta
4   Al percibir en tu mente algo ajeno a sí mismo, el ego hace del cuerpo su aliado porque el cuerpo no forma parte de ti.

V. Las lecciones del Espíritu Santo

A. Para poder tener da todo a todos
1   Cuando tu cuerpo, tu ego y tus sueños hayan desaparecido sabrás que eres eterno.  Tal vez pienses que esto se logra con la muerte, pero con la muerte no se logra nada porque la muerte no es nada.   Todo se logra con la vida, y la vida forma parte del ámbito de la mente y se encuentra en la mente…  La muerte es un  intento de resolver conflicto no tomando ninguna decisión.  Al igual que todas las demás soluciones imposibles que el ego propugna, esta tampoco resultará.
2   Si la mente puede curar al cuerpo, pero el cuerpo no puede curar a la mente, entonces la mente tiene que ser más fuerte que el cuerpo. Todo milagro es una demostración de esto.
5  El Espíritu Santo ve el cuerpo solamente como un medio de comunicación,  puesto que comunicar es compartir, comunicar se vuelve un acto de comunión.
8   Los que comunican miedo están fomentando el ataque y el ataque siempre interrumpe la comunicación, haciendo que esta sea imposible. Es verdad que los egos se unen en alianzas temporales, pero siempre para ver qué es lo que cada uno puede obtener para sí mismo. El Espíritu Santo comunica únicamente lo que cada uno puede darle a todos. Dice: Para poder tener, da todo a todos.

B. Para tener paz, enseña paz para así aprender lo que es
1   Lo que tienes que reconocer es que cuando no compartes un sistema de pensamiento, lo debilitas.
2   La manera de escapar del conflicto que surge de dos sistemas de pensamiento que se oponen entre sí consiste claramente en escoger uno y abandonar el otro.

C. Mantente alerta solo en favor de Dios y de Su Reino
4   Se requiere un constante estado de alerta contra el conflicto. Puedes estar tan alerta contra el ego como a su favor… Tu primera prioridad debe ser mantenerte alerta.


No hay comentarios:

Publicar un comentario